sábado, 11 de septiembre de 2010

Cuando las cosas son como tienen que ser


Estoy en Tokio. Aunque pudiera parecer que llegando desde Manila esto tendría que ser diferente, no tiene porqué ser así. Aquí las cosas también son como tienen que ser. Este es un mundo de gente igualmente amable, que se divierte, que intenta entenderte, que sonríe, y ya veremos qué cosas más. Muy a gusto estoy en estos cuatro días. Pero ahora es muy tarde y el blog me ha dado mucha lata cuando he intentado esta actualización. Así es que aquí lo dejo. Pero, claro, siempre hay que buscar alguna ilustración que acompañe a la entrada del blog con un cierto aire. En este caso, el desconcertado aire que me proporciona el menú de mi bar de yakitori favorito.

20 comentarios:

María José dijo...

¡¡¡Halaaaaaaaaaaaa, me gusta la imagen de tu nuevo blog... y el nombre: un extremeño en Japón pasado por Filipinas, ¿vuelta y vuelta?jejejé!!!
P.D.: Me estás dando una envidia -sana eso sí- ¡yo quiero ir a Japón,:0

Manolo Pérez dijo...

Mª José, muchas gracias. No sabes la lata que me dio ayer la actualización del blog. A ver si es verdad que vienes por Japón.

María Jesús Arribas dijo...

¡Bienllegado a Japón Manolo!
Deseo que te vaya muy bien y se cumplan tus expectativas.
También deseo que sigas siendo tan buen corresponsal como fuiste en Filipinas.
Según leo en la entrada anterior,veo que tienes buenos propósitos.Yo te animo para que así sea .
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Manolo,soy Pili.Han merecido la pena las dificultades de tu nuevo blog,la imagen te ha salido redonda y de lo más simpática.¿Empieza desde cero,o valen los comentarios y entradas anteriores?Es para que aumente cada vez más el número de tus blogueros.A ver si pronto nos escribes en japonés para que nos enteremos bien de tu vida en Tokio, ja,ja.Un abrazo de Pili

Manolo Pérez dijo...

Mª Jesús, muchas gracias por esos ánimos. Espero que la corresponsalía en Japón no sea tan mala como la de Filipinas, jeje.

Manolo Pérez dijo...

Pili, aquí esta la pequeña transformación del blog hacia lo japonés. Claro que siguen estando todas las entradas anteriores, entre otras cosas, porque hay que dar continuidad a los temas filipinos y, así, los nuevos blogueros entenderán por qué, a pesar de estar en Japón, escribo de vez en cuando de Filipinas. Lo de escribir en japonés lo veo muuuucho más difícil, jeje.

Juana dijo...

Me alegro Manolo que tu aterrizaje en Japón cumpla tus expectativas y augure un futuro prometedor.De todas maneras sería noprmal que al principio no salgan las cosas perfectas, pero como dice el refran: "los gitanos no quieren buenos principios para sus hijos", por lo que no debes desanimarte.
En cuanto al blog, está muy bien, y a medida que pase el tiempo ya lo irás mejorando.
Te deseo lo mejor....

Luis González dijo...

Me alegro de que tu reencuentro con Tokio haya sido satisfactorio. Me alegro también que hayas encontrado un lugar con encanto. Asímismo me alegro de que las cosas sean como tienen que ser (¿por qué habrían de ser distintas?)Y sobretodo, y antes que nada, que tú seas feliz y este nuevo "reto" suponga aumentar esa felicidad que, a simple lectura de esta primera entrada, se desprende de las líneas. Un abrazo.

Manolo Pérez dijo...

Juana, muchas gracias. La verdad es que la llegada hubiera sido bastante buena si no fuera por un flemón que me salió el domingo de una muela que ya tenía bastante mal tratada. l martes he ido al dentista (recordad que en Manila ya había ido) y parece que todo va mejor. Es decir, apliquemos lo de los gitanos y a ver si, de este modo, con el flojo comienzo en la salud dental, puedo continuar la estancia pleno de salud en general. Iremos mejorando el blog...

Manolo Pérez dijo...

Luis, sabes que mucho me gusta que escribas en el blog. No te creas, yo ya me trasladé una vez desde Manila a un sitio donde las cosas no eran como debieran de ser (según mis esquemas, claro está). Tokio me está demostrando que es más normal de lo que podría pensarse (según mi normalidad, obviamente). Tú sabes bien que eso me gusta. Dios te oiga con respecto a tus deseos sobre mi felicidad que, por otro lado, son los mismos que yo tengo para ti y tu familia. Tengo que escribirle a la residente en Cáceres. Un abrazo.

joaquin dijo...

Como hoy me siento un poco irónico,del menú me pido el arroz con leche,como tiene que ser.....y esta vez,sin canela (el último símbolo indica que se sirve en plato de duralex?).Un abrazo

Esther dijo...

Querido Manolo:

Estoy segura de que en Tokio estarás bien. De momento, se te nota contento. De todas formas, ya sabes que si tienes morriña de Manila siempre que quieras te puedes dar un saltito hasta aquí. Mi casa siempre estará abierta para tí.

Besitos.

Manolo Pérez dijo...

Joaquín, como bien sabes, no tengo ni idea de lo que significa el cartel pero, si el último corresponde al arroz con leche sin canela en plato de 'duralex', es de lo más caro.

Manolo Pérez dijo...

Esther, muchas gracias por tu ofrecimiento. A ver si es verdad que nos vemos antes en Tokio que en Manila. El Sr. Minakami parece que se aviene a razones.

joaquin dijo...

Sigo irónico.Lo más caro?,si al final va tener mi mujer razón,en el fondo voy a tener algo de "pijo" y me va a gustar el lujo.Ahora en serio,me gusta que estés contento.La verdad es que de cocina japonesa ni idea,en Bonn en los dos últimos viajes hemos visto que han abierto varios restaurantes japoneses,pero no nos hemos atrevido a probarlos,una vez,hace varios anos,paseando por Madrid me topé con un restaurante filipino pero tampoco entré.No me salió "la vena pija",porque al menos los restaurantes japoneses de Bonn eran bien caros.A propósito,es Japòn tan caro como cuentan?Imagino que la diferencia con Filipinas será grande.Un abrazo

Manolo Pérez dijo...

Joaquín es verdad que estoy contento. Para ilustrar un poco la diferencia de precios entre Manila y Tokio, te contaré que en Manila muchos días comía en Dell's (comida filipina) por unos 2 euros. Aquí en Tokio lo más barato (almuerzo) son 10 euros. Pero por la noche la diferencia se agranda, cenar en Kuwago's en Malate me costaba unos 5 euros y ahora las -contadas como comprenderás- cenas de Tokio no me bajan de unos 30 ó 40 euros.

M. Paz dijo...

Manolo,bien llegado, aunque ya han pasado 11 días.¿Y el flemón? Espero que todo vaya muy bien en tu andadura japonesa. Y...gracias a los filipinos por haberte tratado tan bien.Un beso para ti y para todos los blogueros. M. Paz.

Manolo Pérez dijo...

Pazu, que sigo muy bien. Mañana toca dentista otra vez. Ya te contaré.

Anónimo dijo...

Estoy intentando escribir mi comentario

Manolo Pérez dijo...

Anónimo, pues te ha salido muy bien tu intento porque el comentario se ha publicado correctamente. Y si en vez de pulsar "anónimo" én las opciones, pulsas "Nombre/URL" y escribes tu nombre en la casilla "Nombre", tu comentario sañdrá firmado por el nombre o apodo que hayas puesto.