domingo, 14 de febrero de 2010

Año Nuevo Chino en Malate


La semana pasada tenía que haber actualizado el blog pero me dejaron sin internet durante todo el fin de semana. MyDestiny, que es mi proveedor de internet, me estuvo "toreando" todo el fin de semana -incluido el lunes- para una avería que no era solo en mi casa sino que afectaba a todo el barrio. Pero, por lo que se ve, sus técnicos ni se habían enterado. En fin, como ha pasado el tiempo, hemos llegado a febrero y este último fin de semana ha sido muy movido en Filipinas porque han coincidido San Valentín -una de las celebraciones más felicitadas en todo el país- y el Año Nuevo Chino. Mi celebración de San Valentín se ha ceñido a una cena 'camp' en el Casino Español con buenos amigos. Menos mal que no hubo que celebrar más de esta fiesta que, según mi punto de vista, no es sino una más de las instituidas por la sociedad de consumo. Más me han gustado las celebraciones del Año Nuevo Chino. Un grupo de compañeros y amigos se iba a Binondo -el barrio chino de Manila- a ver los dragones y los cohetes. Yo lo pasé en Malate. Ha habido mucha gente en las calles y varios grupos de dragones y bandas con tambores y platillos. Los dragones visitan los negocios para llevar buena suerte para el año. Predominaba el rojo en los atuendos. Por otro lado, había fuegos articiales por todas partes. Los filipinos disfrutan mucho con estas celebraciones, bueno, con cualquier celebración porque no conozco un pueblo con más ganas de "jarana" que, para mí, viene de la capacidad que se tiene en este país para seguir cualquier acto relacionado con la actuación y el teatro o la música. Os dejo este enlace en el que he puesto las fotos de un grupo celebrando el Año Nuevo Chino en Malate. No son muy buenas pero os podéis hacer una idea de la que había liada. Este es el enlace:

lunes, 1 de febrero de 2010

Quiapo


Quiapo es una de las iglesias donde los manileños acuden con más fervor a pedir y a agradecer favores. En esta basílica menor está el Nazareno o el Cristo Negro de Quiapo por el que las gentes de Manila sienten un especial cariño. Hay toda una tradición de cristos negros (e.g. el Gran Poder en Sevilla) y vírgenes negras (e.g. Guadalupe en Extremadura, Montserrat en Cataluña) en España y en Iberoamérica. Pues quizás el Cristo de Quipao es el más reverenciado de Filipinas. Esta talla mejicana llegó en un galeón a Filipinas en 1606. Su procesión el 9 de enero congrega a una muchedumbre que acompaña la "carrosa". Los fieles entregan un pañuelo a los que van en la carroza para que con él toquen al Cristo y se lo devuelvan. Este año parece ser que se han congregado casi dos millones de personas en la procesión y ha habido dos personas muertas (un infarto y un aplastamieto por una carroza) y trescientos atendidos por los servicios médicos. Poco es.
Hoy he estado en la iglesia de Quiapo. Eran alrededor de las cinco de la tarde y la inmensa nave estaba casi llena y la plazas y calles adyacentes estaban tan concurridas como siempre. He encendido tres velas rosas que es el color, según la tradición, para pedir por una buena salud (hay velas con otros colores para el dinero, el trabajo, el amor, etc). Así que encomendado queda al Nazareno Negro de Quiapo que cuide de la salud de todos los blogueros, jeje. Os dejo con una foto de una de las calles que rodean la basílica y que forman este barrio tan popular el cual es visita obligada para cualquiera que venga por Manila.